La Certosa di San Lorenzo,el Cartula de Padula, es un extraordinario edificio religioso protegido por la Unesco. Es la primera cartuja construida en Campania, incluso antes que la de San Martino (Nápoles) y San Giacomo (capri). Y es, con sus 51.500 metros cuadrados, la chárter más grande de Italia y una de las más grandes de Europa. Más allá del tamaño, es verdaderamente un lugar único.
Certosa di San Lorenzo, la historia
La construcción de la Certosa di San Lorenzo comenzó en 1306 por falta de Thomas II Sanseverino, pero fue el rey Carlos II conocido como "el Cojo" quien confirmó la obra. Conde de Marsico y señor del Vallo di Diano, Sanseverino donó el complejo a la orden religiosa cartuja. Su enfoque no era muy religioso, en realidad. Queriendo congraciarse con la realeza angevina del Reino de Nápoles, decidió construir un complejo monumental sobre algunos de sus feudos en Padula, en la provincia de Salerno. Las fértiles tierras de los alrededores se adaptaban bien a la agricultura, tanto que los monjes inmediatamente comenzaron a producir vino y aceite y cultivar frutas y verduras, para ellos mismos sino también para venderlos. Después de la caída de los Sanseverinos, i Cartujos de Padula heredaron la propiedad. Y para la Certosa di San Lorenzo comenzó un período floreciente que duró desde el siglo XVI al XVIII. Se dice que incluso Carlos V, al regresar de la batalla de Túnez, se detuvo aquí en 1535. Para él y su ejército, los monjes prepararon un tortilla con mil huevos, pasado a la historia.
A partir de 1583, la Certosa di San Lorenzo experimentó profundos cambios. El aspecto barroco que hoy admira el visitante es fruto de las intervenciones del siglo XVIII, al igual que sus ampliaciones: el claustro, el refector, la escalera elíptica que traza el fondo. Sin embargo, a principios del siglo XVIII se suprimió la orden cartuja. Los monjes se vieron obligados a abandonar la Cartuja, se robaron muchas obras de arte. Hasta el final de la dominación napoleónica y se restableció el reinado de los Borbones, los monjes pudieron regresar. Aunque, el daño hecho, arruinó para siempre el prestigio de la Certosa.
La Cartuja hoy
Hoy la Certosa di San Lorenzo es un lugar de increíble belleza. Muchos directores lo han elegido como set de sus películas, desde “Érase una vez” con Sophia Loren y Omar Sharif hasta “Cavalli si born” con David Riondino. Inspirada como todas las chárter en la forma de la parrilla sobre la que ardía vivo San Lorenzo, espera ser descubierta. El visitante entra por el lado este, y se encuentra frente a espléndidos ambientes: el Claustro de la Forestería con pinturas barrocas, la iglesia con sus capillas, el Claustro del Cementerio, el refectorio.
Alrededor del monasterio están los jardines, col desierto una vez utilizado por los monjes de clausura y el prior durante sus salidas. Construido durante la expansión del siglo XVIII, una vez albergó huertos y viñedos. Hoy es el lugar perfecto para pasear, después de una visita a las salas de la Certosa.
Foto destacada tomada de Wikipedia (crédito Velvet - CC BY-SA 3.0)
¡Bonito lugar!