Ezio Bosso se ha ido durante unos cinco meses, pero su memoria todavía está vivo y fuerte. La música que dejó a su público y la enseñanza de la vida, hecha de tenacidad y esperanza, seguirá siendo la herencia más querida del Maestro.
Sin embargo, la memoria debe nutrirse. La concreción de las elecciones diarias debe moverse en esta dirección. Precisamente por eso Turín, la ciudad natal y tan amada por Ezio Bosso, ha decidido dedicar un espacio a la memoria de su talentoso hijo.
Un jardín para Ezio Bosso
En los últimos días, a propuesta de la alcaldesa Chiara Appendino, la comisión municipal de toponimia ha indicado qué lugar estará dedicado al director de Turín. La memoria de Ezio Bosso estará vinculada a los jardines de la piazza Statuto. El voto positivo de la comisión estableció oficialmente el título del músico de los jardines que domina el Palazzo Paravia. Este es claramente un gesto simbólico. Un gesto que engloba el deseo de toda la ciudad de no olvidar a Bosso y su gran amor por Turín.
La petición del alcalde
En realidad, como se mencionó anteriormente, la decisión de dedicar los jardines a la memoria de Ezio Bosso no es de los últimos días. Ya a raíz de su fallecimiento, el alcalde Perchas Chiara había expresado el deseo de enfatizar tangiblemente el vínculo del Maestro con la ciudad. Como señaló el primer ciudadano en una publicación en las redes sociales, había propuesto "que un lugar de la ciudad se dedique a la memoria eterna del hombre, el artista, que con su talento ha honrado a Turín en todo el mundo". Con el voto positivo obtenido en la comisión de toponimia, el deseo del alcalde se ha hecho realidad. “Hoy, por fin, podemos decir que este lugar estará ahí, también sobre todo gracias a muchos ciudadanos que se han movilizado en este sentido”, concluyó Chiara Appendino.
Turín no se ha olvidado de Ezio Bosso
Por tanto, con esta decisión se establece una relación aún más fuerte entre el músico y su ciudad. Turín no se ha olvidado del maestro Ezio Bosso y, en virtud de esta elección, nunca lo olvidará. La solicitud, como hemos visto, aunque formalizada por el primer ciudadano, había venido de muchos lugares. De hecho, fueron muchos los turineses que expresaron el deseo, si no la necesidad, de subrayar el abrazo de la ciudad en Bosso con un gesto de esta magnitud. Ahora el Maestro tendrá "su" jardín y su nombre estará íntimamente ligado al de la ciudad que lo engendró.