Fundación Falcone en Malta, un compromiso compartido en la lucha contra la mafia

En Malta, el 10 de noviembre se inauguró la sede de la Fundación Falcone. Un momento histórico que vio a Italia y Malta unidas en la memoria y el compromiso con la justicia y la lucha contra la mafia. La velada, que reunió a destacadas figuras italianas y maltesas, marcó el comienzo de un nuevo capítulo para la Fundación. Nacida en Palermo para honrar la memoria de Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, los dos magistrados que simbolizaron la lucha antimafia en Italia, la Fundación Falcone participa en un proyecto de sensibilización que va más allá de las fronteras nacionales.

Una inauguración emotiva y emocionante

El acto arrancó con imágenes en movimiento proyectadas en la plaza. Los rostros de Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, asesinados por la Cosa Nostra, junto al de la periodista maltesa Daphne Caruana Galizia, asesinada por investigar la corrupción en Malta. Las imágenes recordaron a los presentes la importancia de la lucha por la verdad y la justicia. El notario Robert Aquilina, representante de la Fundación Falcone en Malta, abrió la velada con su discurso. Muy conmovedor el discurso de María Falcone, hermana del magistrado y presidenta de la Fundación. Recordó los sacrificios de su hermano y de Paolo Borsellino, destacando la importancia de preservar su legado para las generaciones futuras. La misión de la Fundación, fundada en Palermo en 1992, siempre ha tenido en el centro la promoción de la cultura de la legalidad, especialmente entre los jóvenes. La apertura de la oficina en Malta representa un paso más en la difusión de estos valores también en el extranjero.

La presencia de la Presidenta de Malta, Su Excelencia Myriam Spiteri Debono, en la inauguración de la nueva sede de la Fundación Falcone fue una señal fuerte y significativa. Su participación subrayó el compromiso concreto de las instituciones maltesas de apoyar la lucha contra el crimen organizado y promover la justicia social. El apoyo del máximo cargo del Estado representa un mensaje de cercanía y colaboración entre Malta e Italia en un camino común hacia la legalidad. La elección de Malta no es aleatoria. En los últimos años, el país ha atravesado una profunda reflexión interna sobre la transparencia y la justicia, y el asesinato de Daphne Caruana Galizia sacudió profundamente a la comunidad internacional. El notario Robert Aquilina, representante de la Fundación en Malta, subrayó hasta qué punto esta sede puede ser un símbolo de esperanza y de renacimiento para un país en el que la batalla contra la corrupción y el crimen sigue abierta.

Uno de los momentos más solemnes de la velada fue la inauguración de la placa de la Fundación, colocada en el centro de Siġġiewi y bendecida por el arzobispo de Malta, monseñor Charles Jude Scicluna. La bendición selló un pacto simbólico de compromiso entre Italia y Malta, invocando protección para quienes están comprometidos en la lucha por la justicia. La velada, cargada de memoria y esperanza, nos recordó que la lucha contra la mafia no es sólo una batalla italiana, sino una misión global.