Italia es un país maravilloso. De norte a sur está impregnado de belleza, historia y cultura. Si es un regalo de la madre naturaleza, como las espléndidas costas o las majestuosas montañas, o es obra del hombre, no cambia la sustancia, lo que hace de Italia un país indescriptible y único. Podríamos describir las bellezas de cada región, de cada pueblo durante siglos y, en cualquier caso, ni siquiera nos acercamos a la realidad. El testimonio de la grandeza de nuestro país está también, y sobre todo en Calabria. Las costas de Calabria con sus fortalezas y sus castillos. Una de todas las marcas, como destinada por el destino, un límite claro, tanto físico como temporal, estamos hablando Castillo de Murat de Pizzo Calabro.
El castillo de Pizzo Calabro
Si Calabria pudiera hablar para decir qué es y qué fue, dejaría a todos sin palabras. Esta tierra lleva consigo la historia de una Italia fuerte, construida con sudor y sacrificio, donde nada era simple sino que había que conquistarlo y ganarlo.
Por luchas y enfrentamientos violentos. Esta fortificación se remonta a finales del 1300 y se utilizó como baluarte para defender las costas del sur de Calabria. Más tarde, unos cien años después, fue en 1480, Ferdinando D'Aragona que se dirigió a Calabria para afrontar un ataque dirigido precisamente a derrocar su reino, ordenó su reestructuración y ampliación. Una vez que logró frenar la “revuelta” organizada por los señores feudales, Federico decidió que se erigieran nuevas partes del castillo, y al mismo tiempo ordenó la construcción de otras fortalezas, incluidas las de Crotone, Cariati, Corigliano y Belvedere.
La ubicación del Castillo
Como ya se mencionó, este castillo marca límites casi físicos y temporales, tanto por su posición geográfica, literalmente cerca del mar, como por el hecho de que el final de las obras de fortificación del castillo está fechado (aunque según fuentes no oficiales) en 1492, el año del descubrimiento de América. También el año que idealmente se conoce como el final de la Edad Media. Otras fuentes más fiables sitúan la fecha de finalización en 1485.
El interior del Castillo de Pizzo Calabro
Una inmersión emocionante en el pasado. Explorando el interior de la fortaleza será posible visitar las habitaciones, las celdas y las áreas utilizadas como dormitorios para los soldados. Y también algunas vitrinas que custodian reconstrucciones de los antiguos uniformes de los soldados, armas, cañones y armaduras.
También es posible ver una colección muy interesante de monedas antiguas. Visitar el castillo es casi imprescindible si vas a Pizzo Calabro. Afortunadamente el costo del boleto de admisión es muy económico y la visita vale mucho más que el precio del boleto. Te aseguramos que el castillo es tan impresionante por fuera como por dentro.
Pizzo
Pizzo, conocido como Pizzo Calabro, es un pueblo costero ubicado en la provincia de Vibo Valentia dentro del Golfo de Santa Eufemia que tiene solo 9300 habitantes. Cuenta con costas realmente hermosas, largas e interminables playas de arena fina. Cualquiera que vaya a Calabria volverá a casa recordando la buena comida, la alegría de los calabreses y el color de las costas.