Hay muchos tesoros de Basilicata por descubrir. Uno de ellos es el pueblo de Irsina, que se encuentra en la frontera con Puglia. Sus orígenes se remontan a la época grecorromana, lo que hace de esta rica aglomeración uno de los pueblos más antiguos de Lucania. El nombre era diferente en el pasado. Hasta 1895 el pueblo era conocido como montepeloso, que parece derivar del griego plusos, que significa tierra fértil.
Asediada por los sarracenos en el 895, quienes la invadieron y destruyeron en el 988. Reconstruido por el príncipe Juan II de Salerno, solo para ser disputado entre los bizantinos y los normandos. Este territorio estuvo en el centro de la batalla de Montepeloso en 1041.
Qué ver en Irsina
El centro histórico de Irsina se encuentra sobre un espolón rocoso. Los lugareños excavaron durante siglos, primero convirtiendo el área en un refugio y luego creando verdaderos hogares. Todavía hoy se pueden admirar las fantásticas "casas cueva", similares en todos los aspectos a las piedras de Matera. La casa es sin duda digna de visitar. cueva de bárbaro, el más hermoso, ahora protegido por la FAI, excavado entre dos cavernas rocosas.
No te pierdas la catedral de Santa Maria Assunta, reconstruida en estilo románico tras el asalto de los sarracenos. Reconstruida con formas barrocas durante el siglo XVIII. La cripta románica y el campanario contemporáneo se han salvado de la violencia del tiempo. Ambos perfectamente conservados. Entre las obras de arte que se deben observar con atención se encuentran la pila bautismal de mármol rojo y el crucifijo de madera de la escuela Donatello.
Para agregar a la lista de visitas:
- iglesia de San Francesco
- Museo Janora
- Virgen del Carmen
- Virgen de la Piedad