Las estaciones pasan, los gustos y los estilos cambian pero el rey indiscutible del armario permanece: los jeans
En el armario el cinco bolsillos nunca falla, porque, como bien sabemos, nunca se oscurece. Los jeans siempre están de moda, son inimitables e insustituibles.
Jeans en mil variaciones
Los vaqueros clásicos de este verano tendrán que "ir más allá". También dejará espacio para las camisas. Los más populares tienen volantes, volantes o alas. Espacio también para shorts y faldas, chalecos, bikinis e incluso bolsos y zapatos. Todo estrictamente en lona azul.
El denim está viviendo una nueva era dorada. Cada vez es más chic y trendy, mostrando una sorprendente capacidad de transformación y pasando de la chaqueta de inspiración couture a los pantalones con volúmenes inéditos a los vestidos de cuento de hadas.
Cincuenta nuevos tonos de azul para ese tejido que en los años 60 representaba la cultura juvenil. Antes era uniforme de trabajo y símbolo de rebeldía. Cómo olvidar a James Dean en Juventud perdida de 1955?
Fue en esos años que revistas de moda como Harper's Bazaar o Vogue comenzaron a ofrecer a las damas los primeros modelos de jeans para el ocio y el hogar. Prendas que conquistan de inmediato a actrices del calibre de Grace Kelly, que las luce en el final de La ventana en el patio. Y Elizabeth Taylor alardeando de ellos en La última vez que vi París. Sin olvidar el modelo pescador de Brigitte Bardot en Y Dios creó a la mujer. Estamos en 1956 y a partir de entonces los jeans seducirán a todos.
El denim es un tejido en constante evolución
Los vaqueros se puede llevar "las 24 horas del día", es decir, del día a la noche y en las ocasiones más diversas.
La tonalidad más solicitada es el azul oscuro que, a través de los tratamientos de acabado, aparece en una amplia gama de tonalidades. Darle piedra lavada, que se lava con piedras abrasivas efecto claro-oscuro, al delave, que parece ser utilizado.
Después del boom paninaro de los 80, hoy no hay diseñador que no lo haya hecho suyo.
Ya sea bordado, precioso o pintado a mano como un cuadro, el denim, en sus infinitas variaciones, se encuentra en el podio de los deseos. Los vestidos de mezclilla se usan solos o con leggings de pantalón. Las chaquetas se renuevan con parches y maxi pins. La longuette seduce por su sin funcionalidad de temporada, es decir bueno en todas las estaciones. Así como el mono estilo trabajador (trabajador) se convierte en un paspartú cuando se combina con tacones XL.
También hay una vuelta al clásico. A los limpios pantalones rectos. Elegante cuando se usa con un blazer y casual cuando se usa con una camiseta.
Resistir yo recortada, jeans que llegan justo por encima del tobillo con cintura alta y dobladillo deshilachado. Novedades son las bermudas hasta la rodilla, perfectas con escote o sandalias para la noche. Mientras que para ocasiones más informales van bien con zapatillas deportivas. Las referencias boho también son fuertes: verde claro para jeans acampanados que estilizan la figura y chaleco de los años 70.
Si este año has decidido no invertir ni un euro en pantalones, róbalos de su guardarropa "él". Combínalos con un top de cuero y un zapato de tacón. Saint Laurent lo sugiere. Glamour garantizado.