Últimamente, la atención por reducir o eliminar permanentemente el plástico es cada vez más urgente. Preguntar es nuestra propia Tierra que a estas alturas ya no es capaz de contener las contaminantes consecuencias de nuestra vida. Y así, entre las protestas en las calles del viernes y las directivas europeas, los oídos se abrieron a una voz importante. Pero todos, en los pequeños, podemos hacer algo. De hecho, hay quienes han pensado en algunos pequeños pasos a dar. Y andrea marangio propuso el pajitas de pasta.
Pasta: la tradición italiana
Ya era el período comprendido entre los siglos XIV y XV cuando se empezaron a recoger evidencias sobre recetas que incluían el uso de pasta. En particular, los italianos tenemos infinidad de tipos de pasta. De macarrones a penne, de fideos a espaguetis. Pero hay dos tipos de pasta que dan lugar a las demás. Si por un lado tenemos la masa obtenida del uso del rodillo, por otro lado tenemos la masa trabajada con las manos. Posteriormente, en el siglo XVI, Bartolomeo Scappi dará vida a una nueva familia de pastas, de la que derivan las formas más pequeñas útiles para sopas. Además, la pasta se presta a innumerables formas de cocinarse. El cacio e pepe romano seduce a todos los paladares, la pasta con salsa boloñesa Toma mucho tiempo. En cambio, la carbonara es rústica y deliciosa. Y ahora viene otro uso: las pajitas de pasta.
Andrea Marangio: muchos años de experiencia y la idea ganadora de las pajitas de pasta
Las alternativas ecológicas para evitar los residuos plásticos suelen representar un coste enorme para las empresas. A pesar de eso, es la moralidad humana y pulmonimiranza para el futuro adoptarlos. Y así, Andrea Marangio, un bartender toscano con una experiencia profesional increíble, tuvo una idea brillante. Al eliminar las perplejidades sobre las pajitas de papel o el enorme desembolso económico de las de metal, ha dejado espacio para las pajitas de pasta. El tipo de pasta que ha elegido es el de zite. Biodegradable, no frágil y además estéticamente bello. Para el cóctel perfecto, las pajitas de pasta nacen ligeramente modificadas en comparación con la pasta normal. Evidentemente, para adherir perfectamente a las funciones de una pajita normal. Y con unos pequeños trucos podrás usarlos para un cóctel con tu pareja.
De norte a sur: las pajitas de pasta empiezan a hacerse populares
La idea de las pajitas de pasta es tentadora desde muchos puntos de vista. En Italia, muchos han seguido el ejemplo de Andrea Marangio. Por ejemplo, el lido República Dum Dum a Paestum, eliminó 20 popotes en dos meses, registrando resultados sorprendentes. El balneario también destacó por sus ideas de vanguardia, ganando también el premio Fabbrica delle Idee 2018. En Bolonia, por otro lado, con el proyecto ButtaLaPlastica, un grupo de estudiantes convenció a los bares para que sustituyeran las pajitas de plástico por de pasta. Y todas estas personas que, a su manera, intentan hacer algo pronto serán una inundación, demostrando que un cambio es posible. Incluso si comienzas con una pequeña pajita de pasta.