Lentejas en la mesa en Nochevieja, una tradición culinaria que los italianos no abandonan y que tiene orígenes muy antiguos. Parece, de hecho, que la costumbre de consumir lentejas deriva de la época de los romanos quienes, en ocasiones especiales, regalaban la 'scarsella' llena de estas legumbres. La scarsella era una bolsa que solía contener monedas y, por tanto, cuando se llenaba de lentejas adquiría un significado de buena suerte, riqueza y prosperidad.
Lentejas
Ya en la antigüedad se conocían los beneficios de estas legumbres redondas, ricas en vitaminas y sales minerales como magnesio y potasio, además de hierro. Como es sabido, las lentejas son incluso capaces de aportar una mayor cantidad de hierro que la carne; y también es una importante fuente de fibra. Las lentejas son redondo, con un achatamiento lateral: una forma muy particular, que recuerda mucho a la de las monedas. Incluso el nombre de la leguminosa, que deriva de la palabra "lente", se refiere a esta forma particular. Así que come lentejas Año nuevo sería un buen augurio porque, dada su forma de moneda, podrían traer dinero a la vida de quienes los comen en la última noche del año.
Además, hay que decir que, durante la cocción, aumentan de volumen. Una particularidad que, según la tradición popular, las hace perfectas como símbolo de una vida próspera. Generalmente en la mesa de Año Nuevo las pequeñas legumbres van acompañadas de suculentas embutido, un embutido elaborado con carne de cerdo muy calórica, por lo tanto también símbolo de abundancia. Por eso se asocia con las lentejas, porque juntas son una combinación de calorías, proteína y sabor. Una mezcla gastronómica perfecta para la fastuosa mesa de fiesta de fin de año.