Estamos en el Valle de Aosta, una Introd y más concretamente en la localidad de Ville Dessus. Aquí se encuentra la antigua casa rural de Maison Bruil. Quizás aún sea poco conocido pero ciertamente digno de atención. Desde fuera parece una casita, que se puede visitar en cuestión de minutos. Sin embargo, a medida que cruza su entrada, las perspectivas cambian lentamente, desplegándose en un camino que lo deja sorprendido.

mesa de madera con especias y frutas
“Archivo: Maison Bruil2.JPG” de Elena Tartaglione tiene licencia CC BY-SA 3.0

Maison Bruil, la casa de producción

Visitar Maison Bruil es una experiencia especial, capaz no solo de sorprender. Entra, observa los detalles arquitectónicos, comprende el significado de las habitaciones es algo que induce a la reflexión. Tan pequeño y acogedor por fuera, tan grande y funcional por dentro. Maison Bruil nació a finales del siglo XVII y luego sufrió una serie de modificaciones a lo largo del siglo siguiente y hasta 600. Lo que vemos hoy es, de hecho, el resultado de la fusión de dos áreas residenciales. La casa es de un vistazo un ejemplo típico de la arquitectura del Valle de Aosta, con un gran uso de piedra, madera y la característica perder.

Maison Bruil - pared de madera con herramientas
"Archivo: Maison Bruil4.JPG" de Elena Tartaglione tiene la licencia CC BY-SA 3.0

Repartida en tres plantas, se estructura según un criterio específico, el que combinaba la vida privada y el trabajo. La piedra angular de la mentalidad campesina por la que en la familia residía la fuerza para sobrevivir. Entonces entenderemos el motivo de las numerosas habitaciones obtenidas desde el sótano hasta la azotea. La organización de los espacios respondió a las múltiples funciones productivas de la casa. Por lo tanto, se podría decir que Maison Bruil no era solo un hogar, al menos no en el significado que tenemos hoy. Esto explica el asombro que se siente al atravesar sus estancias: una reflexiva sucesión de estancias en las que nada se deja al azar. Por lo tanto, está la crotta, el área de secado, la nevera, el ático y mucho más. Un solo techo bajo el cual la familia y los animales se pueden unir, en una perfecta organización de roles.

El museo de la comida

Entrar en el espíritu de Maison Bruil significa captar su esencia. En este sentido, la exposición del museo ofrece una guía útil. Arreglos que pretenden reproducir la idea de la vida del pasado y sobre todo del saber antiguo. La familia era la guardiana del conocimiento que se enseñaron desde temprana edad. Era necesario “seguir el ritmo”, en sintonía con las temporadas o adelantarse, para disponer de existencias futuras útiles. Todo se llevó a cabo con sabiduría y atención para que nada se desperdiciara. Así, se estudiaron muchos métodos para la conservación de alimentos, como las zanahorias colocadas en arena de grano fino. O cofres de madera llenos de vainas en las que guardar salchichas Secar. Hacer que los alimentos duren fue sin duda una prioridad que llevó a la mente del hombre a encontrar las soluciones más dispares.

Maison Bruil - bodega donde se guardaban frutas y verduras
"Archivo: Maison Bruil3.JPG" de Elena Tartaglione tiene la licencia CC BY-SA 3.0

Nos hace sonreír pensar que hoy, aunque tengamos electrodomésticos que no existían en el pasado, somos capaces de hacer que un producto caduque. La modernidad nos ha brindado comodidades que a veces inducen a distracciones. La exposición presentada en Maison Bruil sigue un fil rouge preciso: “Conserver le souvenir… Se souvenir pour conserver”. Guarde la memoria ... Recuerde guardar. Un recorrido por las técnicas más curiosas de conservación de alimentos, sistemas de aislamiento de aire, frío, salazón etc. La visita finaliza con la oportunidad de adquirir productos típicos de la zona, alimentos y cosméticos elaborados con recursos locales. Maison Bruil es un viaje que cuenta la historia de una mentalidad trabajadora y sabia que todavía encuentra su propia dimensión en la actualidad.

Maison Bruil: la casa rural y el museo etnográfico última edición: 2020-10-24T09:00:00+02:00 da Sabrina Cernuschi

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