Joseph Ratzinger, el Papa Benedicto XVI, fallecido a los 95 años, puso fin a su vida terrenal. Elegido sucesor de Pedro el 19 de abril de 2005, el pontífice renunció formalmente al trono papal el 28 de febrero de 2013. En un principio dejó el Vaticano por un breve período para residir en Castel Gandolfo, donde pasó el tiempo del cónclave precisamente para no influir en la elección del nuevo Papa con su presencia indirecta.Tras la elección de Papa Bergoglio, Ratzinger volvió al vaticano tomar posesión de su nuevo hogar, el monasterio Mater ecclesiae en la cumbre del Monte Vaticano, cerca de la reproducción de la Gruta de Lourdes. Esta fue su última casa donde vivió los últimos años de su vida en silencio y meditación.
El Papa Benedicto XVI
Joseph Ratzinger-Benedicto XVI nacido en Marktl am Inn, el 16 de abril de 1927, fue el 265° pontífice de Roma, el noveno sucesor alemán de Pedro, hijo de un policía y una cocinera. Un buen teólogo, un hombre reservado con gran capacidad de escucha, un maestro en predicar de manera accesible incluso sobre los temas más complejos, en casi ocho años como Papa conoció a millones de personas. Hizo decenas de viajes internacionales y a Italia, escribió varias encíclicas para decir que el amor y la esperanza no son algo sino alguien, que es Cristo, y para renovar la doctrina social de Iglesia.
Escribió el Jesus de Nazareth en varios volúmenes, para mostrar que la fe no es una lista de prohibiciones sino una relación de amistad con Dios hecho hombre. Situó los temas de la pobreza y África, los jóvenes, el ecumenismo y el anuncio de la fe al mundo secularizado en el centro de su pontificado.. Y, de nuevo, luchó enérgicamente contra la pedofilia del clero, imponiendo un cambio de rumbo en la conciencia, en las normas y en las actitudes de la Iglesia hacia los sacerdotes pedófilos.
Gran pensador y erudito
Sacerdote desde el 29 de junio de 1951, doctorado en teología con una tesis sobre san Agustín y habilitado para la docencia con otro texto sobre san Buenaventura, enseñó en Freising, Bonn, Münster, Tubinga y Ratisbona. Fue uno de los más importantes expertos en el Concilio Vaticano II. En 77 Pablo VI lo nombró arzobispo de Mónaco y el 27 de junio lo creó cardenal. Su lema episcopal fue "Colaborador de la verdad". Participó en los cónclaves que en el '78 eligieron al Papa Luciani y al Papa Wojtyla. En 81 Juan Pablo II lo nombró prefecto de la Congregación para la doctrina de la fe.
La elección a la silla de Pedro tuvo lugar en la cuarta votación. Sus publicaciones fueron numerosas antes de su elección, pero ya como Papa cultivó el don de la escritura, innovando la comunicación papal. Esto, en particular con la carta a los irlandeses sobre el escándalo de la pedofilia, y con la de los obispos sobre el caso del negacionista obispo lefebvriano Williamson. Con un perfil de Twitter también aterrizó en las redes sociales. Entre sus documentos también dos motu proprio de 2007: uno para restaurar una mayoría de dos tercios para la elección de un pontífice. Y el otro, el Summorum Pontificum, que liberalizó la misa en latín.
